Efectos nocturnos por saturación de información.Tiempo estimado: 3 semanas

BOSQUEJO 1
Me encontraba llegando a reino aventura caminando despreocupado por el laberinto de juegos mecánicos, gente, puestos de perros calientes y maravillado por estar en el reino de la diversión sana. Tomé una ruta que me colocó en el espectáculo acuático, colmaban los gritos en la gradería por el festejo en el agua salina, leones marinos, focas, tiburones blanco ( =/ ) y los muy destacados e inteligentiosos delfines. AAHHHH!!!, OHHH!!!!, APLAUSOS Y MÁS APLAUSOS!!!, el entretenimiento bullía alegrando a las familias presentes.

Acto seguido hizo su aparición un desastre natural, la tierra comenzó a temblar, la gente a gritar, el cielo se torno negro y amenzador, en definitiva la catástrofe se desataba terrorificamente entre auxilios, socorros, salvense quien pueda!!!. Salí del recinto, el ir y venir de la masa acrecentaba a cada arremetida de la tierra que abría el suelo por doquier. A lo lejos miré a Miguel Angel Cornejo dando una de sus múltiples charlas sobre superación personalizada a una veintena de pendejos -que supuse- adoran las salidas fáciles para disque ser requete exitosos en la vidorria (qué madre hace este wey aquí pensé), pero ya me encontraba corriendo para salvar mi pellejo cuando me encontré a mis primos con mi hermano en el tumulto.

Córrele wey!!! que nos va a cargar la chingada!!! me dijo mi hermano Luis, mi primo "el venada" (porque usa lentes) me agarró del brazo y me jaló hacia la salida. Esperen!!! no manchen!!! dijo el Ari (otro primo) no encuentro al virul, creo que se quedó dentro de esa madre!!!. Excelente noticia cabrón!! y ahí vamos a contracorriente el cuartero de audaces primos al rescate del quinto perdido. Los juegos se desplomaban uno a uno por las escalas richter que iban en aumento, las señoras despavoridas gritaban entre ademanes exagerados, la rueda de la fortuna aplastaba al que se le pasara enfrente. A los lejos logramos ver al virul que se acercaba velozmente en un carrito chocón color naranja, bájate cabrón!!! porque nos vamos a morir aquí...
BOSQUEJO 2
Torno la calma, ya era de noche y no sé por qué, pero no habíamos salido del reino de la aventura (ahora de la desgracia), caminabamos con un aire gélido entre ambulancias y socorristas. Dimos vueltas presurosos colocándonos de nuevo a donde horas-minutos-segundos atrás estaban las bestias marinas dando su espectáculo. Escuchabamos las risas de los niños muy cerca de nuestos oídos pero no veiamos a nadie, sólo estaban los delfines paseando en el agua. El horror enchino todita mi piel cuando nos percatamos que las voces de los niños provenían del interior de los delfines. Risas estruendosas discurrían desde los cetáceos - maldito miedo sentía -, llegó mi papá como si nada y nos regaño argumentando que nos fueramos a la casa porque era tarde y teniamos que ir a la escuela...

BOSQUEJO 3

Estaba solo en mi casa mirando desde la ventana que da a la calle, el cielo era de una tonalidad rara entre naranja, morado y azulado. Eran como las 7:30 p.m. los ruidos en el cielo me alertaron inundando de una sensación demasiado extravagante mi cuerpo para definirlo como miedo. Pasaron cerca de 15 ovnis sobrevolando el barrio donde vivo iluminando sigilosamente con luz halógena las calles como patrulla fronteriza. Me agachaba con pavor desmesurado para no ser descubierto, los sonidos intergalácticos se acercaban a la ventana, las luces entraban a la habitación y yo ya estaba muerto de nervios. No se en qué momento salí por la parte trasera de la casa y ya me encontraba en la playa, había muchísima gente, trataba de decirles que los ovnis venían pero no podía sacar palabra por la boca. Todos esbozaban gestos pero nadie hablaba, gritaba con demencia pero no escuchaban -me encontraba en una playa autista? o qué se yo -. Noté una rara y deformada apariencia entre los presentes, a simple vista se veían normales, pero la sorpresa fue percatarme de que todos tenían la cabeza al revés (parte frontal del rostro sobre la parte posterior del cuerpo),es decir, donde debería estar nariz, ojos, boca, se encontraba la cabellera y a la inversa. Me horrorizé y desperté espantado...

BOSQUEJO 4

Estaba sentado en la parte trasera del salón de clases, garabateaba la butaca con obscenidades grotescas propias de la pubertad que experimentaba. Me decía mi cuate el Chavez que la cascarita estaba lista para las 10:20 a.m. hora del recreo, reiamos y nos burlabamos del buen amigo verruga atestándole con bromas acerca de las protuberancias en sus manos morenas de mexica. Entró la maestra de inglés y no recuerdo que decía, por la flojera que nos producía la clase nos salimos escapando al patio central. Ya en el patío, empezó un desfile de uniformes parlando por doquier, entre la multitud alcanzaba a ver a dos ex-novias (conocidas en la universidad) platicando jocosamente con mis archienemigos de la escuela. Extrañeza y rabia se hicieron presente ante la duda de cómo carajos conocían a esos bellacos si aún faltaban años para que yo me vinculara con ellas, se reian de mí a unos metros mientras se dejaban acariciar y besuquear por aquellos tipejos (entró mi raciocinio en acción y supe que estaba soñando). Arremetí con dos puñetazos al par de granujas y mis manos se tornaron similares a las del ilustre Gael en la ciencia del sueño, que buena madriza les propinaba mientras mis futuros amores maldecían mi acción... desperté enojado.

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Vaya situaciones devenidas en sueños fabulosos y raros pienso ahora que escribo. Se me hace que todo esta congoja es producto de la saturación obtenida estas últimas semanas por imágenes, pensamientos y lecturas nocturnas. Nótese a continuación la fórmula (intuyo) que desencadenó esta alegoría de ensoñaciones noctámbulas:
Lecturas
Narraciones extraordinarias
Bola de sebo y otros cuentos
Bartleby el escribiente y otros cuentos
El retorno de casanova
El extraño caso del dr. Jekyll y el sr. Hyde
De perfil
Casi un objeto
+
Cine
Happiness
Story telling
factory girl
4 meses, 3 semanas, 2 días
Before sunset
Todo lo que siempre quiso saber sobre sexo y nunca se atrevió a preguntar
Trilogía del señor de los anillos
El orden del caos
+
Un poco de altibajos emocionales...

2 comentarios:

Guillermo López dijo...

Carnal tienes talento, me entretuve mucho con lo escrito, y si haces que uno se envuelva en la lectura. Enhorabuena karnal

Anónimo dijo...

Vine a despedirme.

Fuiste una persona especial para mí en este mundo y qué menos que decirte adiós personalmente.

No me siento con fuerzas para seguir viviendo en el desván. Necesito una existencia real, más allá de paredes virtuales.

Abrí mi espacio en este universo con la esperanza de poder comenzar una nueva vida, de conocer a personas de carne y hueso que sustituyeran todo lo que se me arrebató.

Busqué amistad, conversación, cariño, comprensión, complicidad, incluso amor; pero en un entorno cercano, que ayudara a mitigar el inmenso dolor y la terrible soledad con la que he sido condenado.

Encontré personas maravillosas, tú eres una de ellas sin duda, pero también gente que terminó por darme la puntilla como se suele decir.

La distancia terminó por pudrirlo todo además, pues me hizo caer en la desesperación de ver que todo al final se quedaba en palabras.

Así que abandono. En esta vida si algo he aprendido es que no se puede decir de este agua no beberé, por lo que no sé lo que pasará en el futuro, pero a día de hoy, pienso que es el final de Alatriste.

Necesito encontrar un nuevo aire de una vez o si no, terminaré muriendo ahogado definitivamente. Estoy al borde del precipicio y es que me siento muy mal otra vez, casi como al principio cuando Nuria me dejó.

Muchas gracias por todo lo que compartiste conmigo y fue un privilegio tenerte al otro lado. Compartir lecturas y escritos con alguien de tu talento, fue de lo mejor que me ha pasado en la vida.

Te deseo lo mejor y que la vida te dé todo aquello que mereces.
Espero que te quede algo de mí y que puedas recordarme con una sonrisa. Yo no te olvidaré.

Nunca se me dieron bien las despedidas, así que lo siento. No sé qué más decirte. Me da mucha pena todo esto.

Un abrazo y hasta siempre.

Ramón/Alatriste.